No mates al mensajero – y seguimos haciéndolo, o yo por lo menos.
“Prueba ese sitio – es el mejor de Torrelodones.”
Como el mensajero en cuestión no tenia credibilidad, no iba. El producto –pan- no consumo mucho; otra razón por no ir. Hasta el nombre del sitio empezaba a caerme mal (tiene la palabra ‘trigo’ y evito consumirlo).
Asi durante un tiempo hasta que otra persona –con mayor crédito en mis ojos- me lo recomendó. Ahora compro un pan de centeno con avena que es espectacular.
Sonrio sobre cómo soy … aunque voy trabajándolo.